La veterinaria es un apostolado.
No se centra solo en curar animales. También se dedica a la extensión, esto es, la educación de las personas y de la comunidad en general.
Y lo podemos realizar de diferentes maneras. En primera instancia, siempre enseñamos cuando tratamos a nuestros pacientes.
No solo revisamos, diagnosticamos y medicamos a los animales en general y a los equinos en particular.
Además hablamos con sus propietarios, tenedores o responsables y les explicamos los “QUE”, “PORQUE”, “CUANDO”, “COMO” de cada enfermedad o lesión.
Sin embargo, existe otra forma de educar, quizás no tan extendida, pero si igual de importante.
Es cuando los profesionales salimos de nuestro ámbito habitual y nos abrimos a la comunidad, nos tomamos un tiempo extra y quedamos a disposición de la sociedad a fin de evacuar todas las dudas que se van acumulando.
Estos momentos son muy importantes tanto para los profesionales como para la comunidad, pues ese intercambio nos beneficia y enriquece a TODOS.
Sin ir más lejos, aquí te dejo un ejemplo.
Siempre es conveniente tomar la temperatura rectal de tu equino al inicio de la jornada a fin de controlar la sanidad de tu stud.
Esta es una excelente forma de prevención de enfermedades y muy económica.
Solo necesitás un termómetro (digital o de mercurio) y 2 minutos por caballo para tomar la temperatura.
¿Muy simple, cierto?
Nada complicado.
Puede que ya lo supieras o puede que no.
Pero es algo que yo SÍ SE y decido libremente, tomarme unos minutos para brindarte mis conocimientos y tiempo, a fin de mejorar la vida de tu caballo y la tuya.
Mi consejo: no dejes pasar ninguna instancia que te permita crecer como individuo y como ser social.
Abel Bacigalupe
Especialista en Educación Universitaria con Orientación en Ciencias Veterinarias y Biológicas
p.d. Otra forma de crecer es a través de la lectura. AQUÍ te dejo el link de mi guía: «Hoy está bien, mañana…?»